«La casa muda»
TODO AL PLANO SECUENCIA
Lo primero que me llego de información sobre esta cinta Uruguaya fue que había sido narrada con un solo plano secuencia. A pesar de no ser la primera, ni la única que utiliza este recurso (La soga, El arca rusa) para un freak cinéfilo, esta mágica técnica, actúa como suficiente motivo para visionarla.
Rodar un plano secuencia, de tan solo unos minutos, habitualmente conlleva, filmar del tirón y sin cortes, obligando a que todo el equipo técnico (cámara, actores, director de fotografía, director artístico, efectos especiales, etc) tenga que ensayar y coreografiar absolutamente todas sus intervenciones, como si se tratase de un show en directo. Si esto es ya caro y complejo para solo una escena, imaginen lo que significa para todo un largometraje.
Pero que ocurre, si separamos este aspecto técnico que le da un valor agregado, solo a un grupo “reducido” de gente que tendrá en cuenta este importante aspecto técnico ¿Cómo queda el film para el público en general?
Probablemente quede un film básico, que tiene un montón de momentos donde no ocurre absolutamente nada y en el cual personajes con actitudes poco verosímiles repiten las mismas acciones una y otra vez. En resumen, aislando la técnica solo queda un film de terror simple, con la metodología y clichés habituales para provocar miedo, vistos ya en cientos de films del mismo tipo.
En contraposición, este film independiente de bajo coste (6000 u$s aprox.) rodado con cámaras de foto 5D Mark III y de origen latino, donde casi no se producen films de género fantástico y terror, tiene como virtudes un grandioso trabajo de cámara que se las arregla muy bien para intentar dar todo el tiempo algo novedoso, y que produce muchísima tensión gracias al truco de acompañar a la protagonista en su periplo por una casa abandonada a oscuras mientras algo que no vemos, la amenaza.
Seguramente este film pequeño pero arriesgado, que como un jugador de ruleta apuesta todo a color, en este caso, a su recurso narrativo, cosa que tiene mucho merito, no esté planeado para funcionar en una estructura mainstream (aunque gracias al boca a boca, funciono muy bien en taquilla en Uruguay y Argentina) ni este dirigido al publico clásico (aunque USA compro los derechos e hizo un remake) y apunte directo a festivales de género donde la forma en la que está narrado haga contrapeso y justifique sus defectos.